lunes, 13 de julio de 2009

Naranjo de Bulnes. Murciana 78 + Cepeda + Pidal-Cainejo

Cómo explicar un finde en los que se suman estos factores: tus mejores amigos + vías que llevas años soñando con ellas + buen tiempo + cachondeo = indescriptible e inolvidable. Pero voy a intentar contar un poco lo que hemos hecho, porque la memoria es frágil, aunque los sentimientos se quedan grabados dentro y cuando recordemos este finde dentro de otros 10 años o más, seguro que a todos nosotros se nos pone el pelo "de picos pardos". Por supuesto echamos de menos a los que no pudieron venir: Jesús, Xosé, Piwi, etc.

LLevamos 2 fines de semana retrasando la salida al Naranjo para pillar buen tiempo, finalmente este finde la previsión era buena, aunque el google maps nos la jugó y nos mandó por la autopista desde Burgos hacia león subiendo por Herrera de pisuerga y aún no está abierta.... es mejor subir a Aguilar de campo. Salimos desde San Agustín de Guadalix a las 16h. los 5: Alberto, Fernando, Jorge, Sona y yo, las risas estaban aseguradas....

Después de cenar en Cabrales con un botellita de sidra natural, subimos al parking y mochilones a cuestas hasta el refugio. La subida fue preciosa, primero niebla y después un mar de nubes con un poco de claridad...luego un cielo estrellado nos acompañó hasta el mismo urriello. Vivaqueamos en la pradera y la luna nos saludo hacia las 5h. iluminando toda la pared oeste...

Hasta las 7,30h. no nos levantamos y desayunamos algunas barritas y zumos. Alberto y yo nos íbamos a la cara oeste por la vía Murciana 78. Jorge, Fernando y Sona iban a la cara este a hacer la via Cepeda.

A primera hora siempre cuesta entrar un poco en acción, el reparto de los largo estaba definido desde casa: yo los impares y alberto los pares, así que me tocaba empezar. El primer largo es sencillo pero entras en calor. Dudas un poco pero la entrada se hace por la fisura izquierda y con tendencia a subirte encima de la laja, donde se encuentra la primera reunión.

El segundo largo tiene unos pasos delicados en travesía asegurados con 2 magníficos clavos y un diedro mantenido.  Este sale de unos 45 metros, con lo que llegas calentito a la reunión debajo del desplome.

El tercero desploma bastante, primero unos parabolts y después algún puente de roca o clavo, metiendo algunos friends en medio. Aceramos un poco y algún pasito para llegar al primer parabolt de la placa desplomada.

En los parabolts aceros continuados y recuperando cintas (subimos 16) porque sino no llegas a la reunión colgada.

La vista era preciosa, pero el viento que soplaba te dejaba frio, con térmica y forro fino tuvimos que ponernos los chubasqueros.

Y cuando Alberto subió ya había una cordada que había escalado los 2 primeros largos unidos...

Ya se habían presentado en la segunda reunión, Manu Cordoba conoce a nuestro colega de Huesca Xosé.

Flipando en colores: Manu Cordoba encadenando el tercer largo de la Murciana (7c+) a vista...


Nosotros seguimos a nuestro ritmo (que esta vez no fue tan rápido como pensábamos) y Alberto se curró el cuarto largo que tiene una salida en aceros (7a+) y después un pasito de 6a para coger una placa que se protege hasta la reunión.

El quinto largo es plaquero, tiene algún pasito bien asegurado con parabolts que sustituyen a los antiguos buriles.

Todas las reuniones tienen 2 parabolts con anillas para rapelar. Esta es la quinta reunión.

La via va bastante recta, es evidente y mantenida por la verticalidad. Ambientazo y roca excelente.

A veces te da la impresión de que los muros son muy compactos y que nos va a poder equiparlos, pero según vas escalando, vas encontrando presas, agujeros para equipar y se disfruta de este paredón.

El largo sexto es bastante largo y llega a la repisa que se cruza con la Rabadá. Después se hace el septimo largo que es un muro precioso y poco equipado, aunque hay un parabolt justo debajo del paso del techito de 6a. El octavo largo es una especie de fisura, con un pasito que da acceso a unos canalizos.

El noveno largo es un diedro evidente y con mucho canto, aquí hay un posible embarque pero está claro el flanqueo a la derecha para continuar el diedro hasta que se divisa el único parabolt que indica la salida hacia la reunión a izquierda. Se monta en 2 parabolts encima de la reunión de argollas para que corran las cuerdas.

El décimo largo es la parte izquierda de la Laja España, está algo rota la roca, pero se escala bien.
Él largo 11 es bastante largo y hace una media luna buscando los buzones y algún parabolt suelto que indica el camino. La reunión está a 50 metros.

El último largo sigue siendo plaquero y bastante recto. Aquí nos dieron caza Manu y Mikel y como unieron los 2 últimos largos con su cuerda de 75 metros... nos adelantaron por la derecha.

En paralelo, el trio calabera (Sona, Jorge y Fernan) estaban en la Cepeda sufriendo la solanera por la cantidad de gente que había en la via.... y es que como no pudimos madrugar mucho, cuando llegaron a la cara este había "ondonadas de gente" empezando a subir....

La vía la disfrutaron, pero subieron calentitos por el sol y por tener que esperar a gente que además era bastante mal educada en el sentido "alpino" de la palabra y que no te dejaban ni sitio en las reuniones... pero finalmente pudieron concluir la via. (que intentamos en el 99 y que nos bajamos por los rápeles).

Un día espectacular y fotazo en la cumbre de las 2 cordadas. 
Gracias a Haritz y Olivia por las fotos y por el guante...

Bajamos 3 por los rápeles de la Teógenes y 2 con la pareja de la cumbre por los rápeles de la directa hmnos. Martínez. En 3 tiradas de 60 estábamos en el suelo. Eran las 19,30h. y a las 20h. servían la cena....

Llegamos justo a las 20h. para sentarnos a cenar y coincidimos en la misma mesa con el equipo de jóvenes alpinistas. Manu Cordoba y Mikel Bonilla bajaron de la murciana rapelando y llegaron a la misma hora que nosotros porque se les enredaron las cuerdas en una tirada...

Estos dos chavales, que son unas auténticas máquinas, además son supermajetes.

La cena nos dejó finos, finos. Preparamos el material para ir el domingo a la Norte y caimos como plumitas en los sacos.

El domingo desayunamos a las 7h. y a las 8,30h. estábamos a pie de la via Pidal a la Norte. Pero ya había una cordada delante de nosotros. El primer largo es travesía descente hasta un nicho donde hay 2 clavos. El segundo largo hace una especie de "S" para subir a una repisa con un puente de roca+clavo. Después un ensamble hasta el lomo donde se hace un largo de placa sencillo y protegido con algunos clavos.

Aprovechamos el ensamble para adelantar a la primera cordada (previo permiso). Según vas escalando te imaginas al Cainejo descalzo por esta via en el 1904 y alucinas pepinillos...

En la chimenea es donde realmente coge más ambiente la vía. Son 3 largos con reuniones de clavos.

El último largo con dificultades tiene un par de clavos para la salida. Jorge se lo curró con un Master.

Después la chimenea se tumba un poco y se puede subir en ensamble o a pelo. Es una trepada larga de unos 120 metros hasta la cumbre.

Foto de rigor en la cumbre después de hacer la Norte en unas 3,30h. Bajamos a los rápeles de la Teógenes porque subía gente por la Sur.

Otra vez en 3 rapeles llegamos al suelo y bajamos al vivac al lado del refugio para recoger las mochilas. Sona nos sorprendió con una bandejita de cabrales, chorizo y jamón para coger fuerzas y bajar a por el coche.

La bajada siempre se hace más pesada que la subida y nuestras rodillas se quejan más... a las 17h. llegamos al coche. Cansados, felices, hambrientos y muy sucios.

De bajada a Cabrales parada imprevista para chapuzón en el rio Cares como dios nos trajo al mundo... nos quitamos la suciedad y parte del cansancio. Después paramos en cabrales a comer. A las 20h. salíamos hacia Madrid, pero varios atascos en Santander, Burgos y casi llegando a Madrid, hicieron que llegásemos a casa hacia la 1h. del lunes. El finde superior. La reseña del desnivel perfecta. y toda la información del Naranjo en el blog del Bulnesland.
Para los rápeles de la Sur por la Teógenes se desciende más o menos parecido a la bajada normal: se situan un poco más a la izquierda (sentido bajada) del primer rapel con cadena de la Normal, mirando hacia el nicho de salida de la Cepeda. Todos son 2 parabolt con anillas. Para esta línea si son necesarias cuerdas de 60 metros. El segundo rapel tiene una parte volada corta. Con el tercero se puede llegar a unas gradas si se hace con tendencia a la izquierda (según rapelas), sino se puede hacer una cuarta reunión y un cuarto rapel que nos dejaría en el suelo.
"Poder disfrutar de los recuerdos de la vida es vivir dos veces"
MARCIAL

lunes, 6 de julio de 2009

El Espolón de Manolín a la luz de la Luna

Esta semana pasada ha sido de las más calurosas del año. Por la noche el termómetro no bajaba de los 20ºC y sacando a pasear a Rita el jueves se me ocurrió el hacer alguna clásica de la cabrera a la luz de la luna, aprovechando "la fresca" y descansado por la mañana cuando aprieta el sol de verdad...

El Espolón de Manolín es la via que más veces he repetido en mi vida, casi todos los amiguetes que vienen a Madrid suelen querer hacerlo, también lo hemos repetido en diferentes modalidades para "entrenar", es una vía que me parece muy completa por lo variada y dentro de la sierra de la cabrera de las más larga de todas. Como nunca habíamos escalado de noche por gusto, sino por obligación, escogimos el Espolón que lo conocemos bien, para  trepar como las alimañas... de noche. Una pena que la cámara digital no fuese capaz de recoger en alguna imagen el espolón iluminado por la luna, sólo pude hacer la foto hacia el pueblo aprovechando la luz de las calles y la luna en el cielo.

Al final sólo se pudo venir Fernando, así que me recogió a las 23h. en casa y a las 24h. estábamos a pie de la vía preparados para comenzar, con el frontal encima del casco, mallas cortas y camiseta, con una temperatura perfecta y una luz mágica.  El primer largo lo hice metiendo algún friend por si acaso, pero enseguida me di cuenta que lo que falta de luz lo suples perfectamente agudizando el tacto y eso provoca que la concentración al escalar sea aún mayor que por el día. Supongo también que escalar de noche es algo a lo que no estamos habituados y por eso te concentras más. Practicamente no usamos el frontal salvo para colocar algún seguro dentro de las fisuras, donde la luz no entra. El segundo largo lo hicimos por la placa de adherencia de chapas, Fernando se lo curro en un plis-plas, normalmente hacemos en un largo hasta el muro, pero esta vez lo partimos e hicimos la bavaresa en otro largo. La luna a las 24h. estaba casi a nuestras espaldas pero poco a poco giraba hacia nuestra izquierda (mirando al pico) y la luz entraba mejor un poco ladeada, así no nos hacíamos tanta sombra.

Cuando ves escalar a tu compañero de noche, ves su figura y las estrellas en el cielo, de verdad hacía mucho tiempo que no flipábamos tanto con una escalada y tan cerca de casa. El largo del murete fue espectacular, vas navegando por las regletas, ves a tu compi abajo con el pueblo iluminado, una pasada. Hicimos la salida por la fisurita que sale directa a la reunión, colocando un par de seguros antes. Después Fernan hizo el penúltimo largo de fisura y el último lo hicimos por la fisura estrecha de la derecha. A las 2am estábamos de nuevo en las mochilas y a las 3am en la cama después de un bañito nocturno en la piscina.
Esto lo volveremos a repetir porque los que no pudieron venir se quedaron con ganas de probar y de verdad que merece la pena porque es una nueva experiencia, eso si, conociendo bien donde vais.
Pongo un link para animaros a disfrutar la vida, "can you feel it", debéis aprender a sentirlo... como hacía Michael con la música nosotros sentimos la roca, la noche nos ayuda a agudizar nuestro tacto... que la vida es muy corta y muy perra, pero hay que disfrutarla a tope. Salud.